Andar por las ciclovías ha sido un tema que genera diversas discusiones, aún siendo uno de los principales incentivos para el uso de la bicicleta. Fuera de toda polémica, nosotros, el Centro de Bicicultura, les entregamos las siguientes recomendaciones para el uso de estas vías:
Foto: Recicleta
- Aprenda a identificar una Ciclovía o Cicloruta de una Pista Recreativa. La primera es para transportarse de un punto a otro en bicicleta (Isabel La Católica) y puede ser usada a una velocidad mayor y constante; la segunda está diseñada más para paseos recreativos (Dublé Almeyda) y por su diseño zigzageante, mala visibilidad y estrechez, debe ser usada a baja velocidad y precaución.
- Mantenga su derecha en la conducción. Recuerde que por lo general estas vías son de doble tránsito, (salvo algunas como Curicó y Santa Isabel, que son unidireccionales) y que por lo silencioso de su avance es difícil percibir al biciclista que nos adelanta.
- Ponga mucho cuidado con los cruces de calles o intersecciones. En los pasos de cebra, zona compartida con peatones, por ley el ciclista está obligado a cruzar caminando, como si fuera un peatón. Cuando el cruce está señalizado con dos líneas blancas paralelas, quiere decir que el ciclista podrá cruzar montado en su bicicleta. En cualquier caso, siempre hay que poner atención al movimiento de los autos que quieren doblar.
- Cúidese de los peatones distraídos, quienes generalmente las usan sin conciencia que se trata de vías exclusivas para bicicletas. Ellos son la parte más vulnerable del tránsito, nosotros debemos cuidarlos e informarles sobre los riesgos de caminar por ahí.
- Cuidarse de las bici-motos, que si bien no debieran transitar por estas vías, muchas veces lo hacen, excediendo los 30 kilómetros velocidad. Hay que estar alertas.
- Cúidese de las mangueras de riego urbano. Para pasar sobre ellas debe hacerlo en sentido perpendicular a la rueda, nunca de costado, porque son fuente frecuente de caídas.
- Las subidas y bajadas en las intersecciones son un tema que afecta a la masa de la bicicleta y a los riñones y articulaciones de los biciclistas, sobre todo en bicicletas sin amortiguación. Al cruzar eleve el cuerpo del asiento, y disminuya velocidad.
- No bote basura en la ciclovía ni en ninguna parte de la calle. Transporte sus deshechos hasta el basurero más cercano. En este mismo sentido, no escupa el chicle.
- Si adelanta a otro biciclista, haga sonar su campanilla, silbe o avise que va a pasar. No asuste a su compañero de vía. Recuerde que la colisión biciclista-biciclista siempre resulta muy dolorosa.
- Planifique su viaje, salga temprano, pedalee con tiempo. Nunca apurado. Así podrá enfrentar con mayor paciencia y templanza los mil obstáculos que encontrará en su camino. No es la idea convertir un acto libertario de amor por la vida y los seres humanos en una guerra permanente de enfrentamientos diarios desagradables y desgastantes. La impotencia y la cuota de frustración que conlleva terminan por minar la salud y la voluntad y atentan directamente contra el placer inigualable de deslizarse en bicicleta.
Deja un comentario