Este Martes 3 de Julio el Automóvil Club de Chile emitió el siguiente comunicado a propósito del último trámite legislativo que falta para aprobar la rebaja de velocidad en zona urbana de 60 a 50 km/h. y complementar con ella la nueva Ley de Convivencia de Modos, o de Convivencia Vial que entrará en vigencia a partir de noviembre próximo en todo el territorio nacional.
Declaración
El Automóvil Club de Chile respalda y adhiere el trabajo que más de 100 asociaciones civiles, organismos públicos y privados han realizado por bajar la velocidad máxima en zonas urbanas de 60 a 50 Km/hora.
Según los estudios que hemos realizado, el 60% de los conductores nacionales reconoce exceder las velocidades máximas en la ciudad y el 50% en carreteras, y lo hacen en un promedio de 20 kilómetros sobre la máxima, es decir, en zonas de 100 kilómetros por hora se desplazan a 120, en zonas de 120 a 140 km, y así, sucesivamente. Además, sólo el 30% de la actual generación de conductores reconocen estar atentos a la señalética vial destinada a informar sobre los límites de velocidad permitidos, lo que demuestra que gran parte de nuestros automovilistas les gusta desafiar las normas del tránsito y no tienen noción sobre los peligros que reviste abusar del acelerador La velocidad tiene una incidencia brutal en la siniestralidad vial y, fundamentalmente, en los atropellos que ocurren en Chile.
En 2002, cuando el resto del mundo estaba bajando los límites de velocidad, nuestro país fue el único que los subió de 50 a 60 Km/Hora en zonas urbanas y de 100 a 120 Km/Hora en carretera. Esa fue una pésima decisión de los legisladores de ese entonces, ya que la iniciativa nos hizo ubicarnos entre los países con peores índices de mortalidad de peatones de la región.
Muchos aún no lo entienden, pero por cada kilómetro que se excede la velocidad se tiene un 7% más de probabilidades de protagonizar un siniestro vial. La disminución de los límites de velocidad evitaría la muerte de a lo menos 300 personas al año, por lo tanto, llegó el momento que exista una mayor voluntad por parte de nuestros parlamentarios para aprobar aquellos proyectos de ley que permitirían reducir la tasa de fallecidos y heridos en siniestros viales, que en estos momentos es el principal problema de salud pública, social y económica del país.
Alberto Escobar
Gerente de Movilidad y Políticas Públicas de Automóvil Club de Chile
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